Un supresor natural de malezas
El mantillo tiene muchas ventajas. Además de reducir el crecimiento de malezas, mantiene la humedad del suelo, mejora el estado y la fertilidad del suelo, y se suma al atractivo visual general de su jardín.
Aplicar mantillo significa cubrir el suelo de sus lechos con materiales naturales como astillas de corteza. Este método de horticultura orgánica sirve para proteger el suelo y suministrarle nutrientes.
Viento, clima, sequía: el suelo de su terreno está expuesto a muchos factores externos. Por lo tanto, podría resultar útil aplicar una capa protectora en la forma que se denomina "mantillo". Los jardineros han aprendido este principio de la naturaleza. Después de todo, no hay prácticamente ningún suelo sin cubrir: hojas, ramas rotas, plantas o una capa de humus suelen cubrir el suelo de forma natural. Si aplica mantillo de forma apropiada, el suelo permanece húmedo ya que el viento no se la puede llevar y el agua no se evapora tan rápidamente. En cambio, el suelo absorbe la lluvia y no deja que se vaya. La capa protectora también actúa como una manta térmica que permite acelerar el crecimiento de las plantas y evitar que crezcan las malezas. En el caso de plantas frutales y hortícolas, que son particularmente termófilas, el mantillo puede incluso aumentar el rendimiento.
Ayudantes útiles como los gusanos, las bacterias y los microorganismos aflojan el suelo bajo el mantillo y descomponen la cubierta orgánica de recortes de jardín y similares, añadiendo nutrientes al suelo y aumentando la capa de humus. Se dará cuenta de que necesita regar menos y pasar menos tiempo en aflojar manualmente la tierra de un lecho bien cubierto con mantillo.
Con el práctico remolque para su X100, disponible como opcional, puede transportar incluso grandes cantidades de mantillo de forma rápida y cómoda directamente a sus terrenos de cultivo.